Presidentes tolimenses de Colombia - Darío Echandía

Es uno de los presidentes tolimenses que ejerció su mandato en tres ocasiones sin haber sido elegido por votación popular, y que contrastan con una de sus frases más famosas que han hecho historia:
- ¿El poder para qué?

A pesar que lo ejerció en momentos coyunturales cuando remplazó a Alfonso López Pumarejo que se licenció por la enfermedad de su esposa durante 6 meses, y luego con la ayuda de Alberto Lleras Camargo que arengaba por la radio Nacional con el respaldo de los militares de mayor rango, haciendo el llamado a la población para que ejerciera presión en las calles por la defensa de las instituciones democráticas, cuando en la madrugada del 10 de julio el Coronel Luis F. Agudelo y el Capitán Olegario Camacho acudieron a la habitación que ocupaba el Presidente López en el hotel Niza con el fin de decirle que los militares habían tomado la posesion de la Guarnición de Pasto y ordenado su detención, y luego el mismo coronel le presentara en una hoja de papel sellado en  donde lo quiso obligar a deponer del ejercicio de su cargo, en la que constara su renuncia voluntaria, y así encargar del mando, al Coronel Diógenes Gil,  y que en medio de esta situación y bien informado, Darío Echandía inmediatamente se hizo nombrar como presidente en el Senado en ejercicio para controlar bajo su mando la presidencia de su jefe inmediato elegido por las urnas. Y luego en el Bogotazo cuando aceptó ser parte del gobierno presidido por Mariano Ospina Pérez, y luego con la aceptación de la Gobernación del departamento del Tolima, tras la violencia provocada por la muerte de Gaitán, y por último, ser participe de las reformas de Carlos Lleras Restrepo en el periodo del Frente Nacional. 

Más conocido como "El Maestro Echandía" por sus dotes personales y de enseñanza tanto en su vida privada como en la pública, y de convertirse en la Conciencia Jurídica de un país y un Estado de derecho convulso por la situación de violencia social y económica que le tocó vivir debido a las injusticias sociales por la mala distribución de la riqueza, en un país inmerso en los viejos latifundios y las exigencias de las nuevas fuerzas sociales y productivas que desde antes exigían cambios estatales tanto económicos como jurídicos de unos modelos de producción que generaban las inconformidades de las grandes masas trabajadoras del campo y la ciudad, enclaustradas en la constitución impuesta de 1.886 y los cambios dados a esta desde 1.887 y 1.910 en donde el poder eclesiástico se confundía con el del Estado, y adonde las clases dirigentes le apostaban a sostenerse en medio de una Guerra Mundial que dividió al mundo entre los que estaban con las ideas del capitalismo tradicional, el modelo socialista que emergió de "La Revolución de Octubre" en Rusia con el triunfo de los bolcheviques, o de los que querían ser los nuevos dueños con las ideas preconizadas por los seguidores de Hitler. Le correspondió vivir y actuar en consonancia con lo que sucedía a su alrededor, colaborando con el triunfo de Olaya Herrera y compartiendo  las mismas ideas que preconizaba López Pumarejo, y todas esas corrientes liberales y socialistas que exigían nuevas leyes acordes a las circunstancias que a su alrededor se gestaban en la vida económica y social. Nacido en Chaparral el 13 de octubre de 1.897, hasta el final de sus días el 7 de mayo de 1.989 en Ibagué, ejerció y dejó una huella histórica de su labor como hombre de paz por sus actuaciones personales a través de su vida y obras, y demás actos jurídicos que en su labor labró para el sostenimiento de un estado social de derecho por el que siempre preconizó y participó.

Coadyuvó para que se diera la expedición de la "Ley 28 de 1.932" en el gobierno de Olaya para que las herencias de las mujeres las pudieran manejar libremente sin las tutelas de sus esposos, reformas que desde la revolución francesa y dentro del marco de la igualdad de géneros ya se aplicaba en otros países desde finales del siglo y principios del otro en que vivió, lo mismo que la "Ley 200 de 1.936" antecedente de la Reforma Agraria  y los demás principios que sentaron las bases del derecho laboral en Colombia luego que le ocasionaron contradictores políticos de los conservadores a Alfonso López Pumarejo porque se parecían a las mismas que hicieron los dirigentes de "La Segunda República española" y que conllevaron a la guerra civil y golpe de estado de Franco contra esta en 1.939, con el antecedente de la división liberal que también influyó  en las decisiones que el gobierno tomó, pues mientras en el de Eduardo Santos se mantuvo la neutralidad de Colombia respecto de "La Segunda Guerra Mundial", el hundimiento por torpedos alemanes y metralletas contra los ocupantes de las fragatas o cargueros Resolute, Roemar y Rubí de una flota de más de cien submarinos que estaban en todo el mar Caribe merodeando, lo mismo que en las costas colombianas, de Venezuela y sobre todo Panamá  con el fin de impedir los avituallamientos de los norteamericanos y canadienses como también del envío del petróleo para sus naves, hicieron que  en 1.943 Colombia declarara el estado de beligerancia contra Alemania como país agresor y que conllevaron a una mayor división de los partidos liberal y conservador dentro de sus propias filas, que mellaron más el espíritu de concordia, e hicieron  más invivible la estabilidad del segundo mandato de López Pumarejo, que a  pesar de haber dicho que no continuaría con las reformas que había iniciado en el primer periodo, dentro del seno de las fuerzas militares del ejército, el descontento era generalizado por cuanto además, de que en el gobierno de Eduardo Santos se hicieron más nombramientos con el aumento del pie de fuerza, y fuera de ser beneficiarios del incremento de los salarios a la oficialidad, tampoco veían con buenos ojos el interés del gobierno en la nacionalización y unificación de casi todas las policías que habían sin un mando unificado a nivel nacional, y a quienes en parte les correspondía dirimir los conflictos de tierras que en su mayoría estaban al servicio de los políticos y gamonales de turno, para implementar y velar sobre todo en los minifundistas campesinos, la reglamentación de "La ley 200 de 1.936" basada en la función social de la propiedad, y de la cual Echandía era junto con los otros dirigentes, la esencia jurídica de los cambios hechos. Así las cosas, la intemperancia dentro de las filas del ejercito provocaron el golpe militar por unas cuantas horas, mientras Echandía y Alberto Lleras Camargo lograron controlar la situación en medio de una guerra mundial en donde los brotes de los seguidores del nazismo que ejercían su  influencia dentro de altas elites económicas, más los consabidos malos manejos de familiares suyos con fines lucrativos tanto dentro de las mismas instituciones castrenses, y también con lo sucedido con la compra a un precio menor de la Hacienda o Trilladora Tolima al alemán H. J. von Mellenthiny, y del conocido negociado de la Empresa holandesa de Handel con los accionistas colombianos, más la calumnia  por la muerte de Mamatoco que enrarecieron el ambiente político y social que minaron su credibilidad para sostenerse en el Poder, y del cual nuestro ilustre personaje, muy parecido a lo que hizo en su momento Manuel Murillo Toro como gobernante, este lo hizo para defender las instituciones del Estado de Derecho en Colombia.

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